El guardián del faro es un enemigo peligroso, sobre todo por la contaminación de esporas que se produce durante el combate. Aquí tienes algunos consejos que podrían ayudarte a sobrevivir:

- Evita permanecer en suelos o charcos contaminados. Sus ataques dejan charcos de esporas que hacen que la intoxicación se acumule rápidamente: no tardes en salir de ellos.

- Observa atentamente los movimientos del jefe. Esquiva sus ataques saliendo de sus zonas de ataque y alejándote de las superficies infectadas.

- Si aún no tienes el conjunto antiesporas, recurre a la movilidad: mantente en movimiento, retrocede cuando sea necesario y evita quedarte quieto durante demasiado tiempo.

Colocarte de forma inteligente y tener paciencia son vitales para ganar el combate.