La buena noticia es que cuando muera, el personaje aparecerá de inmediato en tu base; la propia base, los planos, los edificios, el nivel y las habilidades del superviviente no se verán afectados por la muerte. ¡El juego continúa!
Pero también hay malas noticias: tras el fallecimiento, el inventario del personaje quedará vacío. Puedes intentar volver al lugar donde has muerto y, si encuentras el cadáver (por desgracia es algo que no ocurre siempre, ya que los zombis hambrientos y los animales salvajes ¡siempre andan de un lado para otro!) podrás recuperar tus pertenencias. Debes saber que si optas por esto asumes un riesgo ya que cabe la posibilidad de que el cadáver haya desaparecido o de que tu personaje muera una segunda vez.
En todos estos casos... acabarías perdiendo los recursos definitivamente. Pero aceptar la pérdida no significa que debas ceder a la desesperación; en ocasiones es mucho más fácil encontrar nuevos objetos, ¡sobre todo porque el juego te ofrece muchas oportunidades de ello! :)